El calendario de poda de árboles frutales puede variar según la comarca o región, el clima y el tipo de árbol frutal. Sin embargo, vamos a planificar un calendario a modo general de la poda de árboles frutales:
1. Diciembre - febrero: Durante el descanso invernal, es habitual realizar la poda de formación en árboles jóvenes. Se eliminan ramas muertas, enfermas o cruzadas con otras. También es buen momento para dar forma al árbol y fomentar una estructura fuerte y abierta.
2. Marzo - abril: Una vez superado el riesgo de heladas se realiza la poda de limpieza para eliminar cualquier desarrollo muerto o dañado que haya podido ocurrir durante el invierno. Es un buen momento para hacer ajustes en la forma y el tamaño del árbol.
3. Junio - julio: Durante el verano, podemos realizar una poda de clareo para eliminar si es necesario el exceso de brotes y ramas débiles. Esto va a permitir que la luz y el aire circulen mejor en el interior del árbol, favoreciendo una buena salud y una buena maduración de los frutos.
4. Septiembre - octubre: En otoño, aunque no es común hacerlo, se puede realizar una poda de mantenimiento, eliminando cualquier crecimiento no deseado. También es un buen momento para inspeccionar el árbol en busca de enfermedades o plagas y aplicarle un tratamiento.
Recomendaciones Generales:
- Evita la poda intensa en primavera y verano, ya que esto puede generar una nueva brotación que no tendrá tiempo de madurar antes del invierno.
- Utiliza siempre herramientas de poda bien afiladas y limpias para evitar daños al árbol.
- Valora bien las necesidades específicas de cada árbol frutal, algunos pueden beneficiarse de podas más ligeras o más severas según sus características.
- Recuerda que las condiciones climáticas pueden influir en el momento adecuado para la poda en tu área específica.
Calendario de Poda de Árboles Frutales
16 de enero de 2024
El calendario de poda de árboles frutales puede variar según la comarca o región, el clima y el tipo de árbol frutal. Sin embargo, vamos a planificar un calendario a modo general de la poda de árboles frutales:
1. Diciembre - febrero: Durante el descanso invernal, es habitual realizar la poda de formación en árboles jóvenes. Se eliminan ramas muertas, enfermas o cruzadas con otras. También es buen momento para dar forma al árbol y fomentar una estructura fuerte y abierta.
2. Marzo - abril: Una vez superado el riesgo de heladas se realiza la poda de limpieza para eliminar cualquier desarrollo muerto o dañado que haya podido ocurrir durante el invierno. Es un buen momento para hacer ajustes en la forma y el tamaño del árbol.
3. Junio - julio: Durante el verano, podemos realizar una poda de clareo para eliminar si es necesario el exceso de brotes y ramas débiles. Esto va a permitir que la luz y el aire circulen mejor en el interior del árbol, favoreciendo una buena salud y una buena maduración de los frutos.
4. Septiembre - octubre: En otoño, aunque no es común hacerlo, se puede realizar una poda de mantenimiento, eliminando cualquier crecimiento no deseado. También es un buen momento para inspeccionar el árbol en busca de enfermedades o plagas y aplicarle un tratamiento.
Recomendaciones Generales:
- Evita la poda intensa en primavera y verano, ya que esto puede generar una nueva brotación que no tendrá tiempo de madurar antes del invierno.
- Utiliza siempre herramientas de poda bien afiladas y limpias para evitar daños al árbol.
- Valora bien las necesidades específicas de cada árbol frutal, algunos pueden beneficiarse de podas más ligeras o más severas según sus características.
- Recuerda que las condiciones climáticas pueden influir en el momento adecuado para la poda en tu área específica.
